martes, noviembre 09, 2010

Hoy. Ahora.

Hoy. Ahora. Ahora solamente seamos nosotros, al mismo tiempo que somos todos los demás, todo el resto del mundo. Simplemente seamos, y juguemos, juguemos hasta que el tiempo se nos acabe y no nos quede más de él, dejemos que se escape por entre nuestros dedos, cual arena de esos relojes vítreos, pero no sin disfrutarlo. Seamos los niños que fuimos antaño y que dejamos de serlo porque olvidamos que la vida es un eterno juego. Corramos. Caminemos. Sonrojémonos. Dejemos simplemente de ser algo para ser algo más, algo que una vez fuimos pero que hoy no somos porque tememos ser. Tómame de una mano, aférrala. Yo posaré mi otra mano suavemente en tu cintura, con la misma delicada suavidad con la que se posa una mariposa en alguna flor olvidada por todo el resto del mundo. Y así bailemos. Bailemos juntos, lento, ojos enfocando otros ojos-espejo, con la respiración entrecortada por el éxtasis de la emoción, sintiéndonos sentirnos, frente al resto del mundo, frente a los flashes de bombillas apagadas, o solos, qué más da. Si el momento es nuestro, solamente nuestro. Si la vida es nuestra. Y así hasta que todo termine. Y si pecamos qué más da. Si alguien nos juzga, riamos. Porque fuimos felices. Porque seremos felices sabiendo que alguien, alguna vez, en algún tiempo, escribirá sobre nosotros; algún escritor al que llamarán maldito contará nuestra historia. Porque, según algunos y muchos quizá, ese escritor maldito dirá que reímos porque fuimos-somos felices. Bailemos…

3 comentarios:

eMiLiA dijo...

Me encantóoo!!!

Toda referencia a la infancia, la libertad, lo primigenio me toca de lleno.

:D

Y lo que citaste de mi comentario anterior es de Pizarnik.
Ella tenía un rollo importante con la infancia (por eso la quiero, ja)

oliva dijo...

También estoy de acuerdo con eMiLiA, son unas palabras muy bonitas. Dejar que el tiempo se escape, disfrutando es la mejor deseo para un vinculo entre dos personas. Escribes muy bien (ya lo sabes). Lo que deseo es que la otra persona pueda también apreciarlo y leer estas palabras que le dedicas, sin duda, es imposible que ella se olvide de ti...

Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.
...
Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.
La vida es bella, ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amigos, tendrás amor.

Juan Goytisolo

Me gustaron tus letras.

saludos.

Carlos dijo...

Emilia:

No conozco esa escritora...ahora voy a empezara a buscar algo de ella para leer en el verano venidero.. :D

Lemaki:

Gracias por comentar con esos versos certeros ( a veces me olvido que la vida es bella) :D

Me alegro que haya gustado este escrito!! :D

¡Abrazos!